El amor, Aldo Bernal

Creo que el amor está mal definido,

al menos, al inicio.

Se amasa a golpes de destino,

y se trata de resanar

con algo de suerte autorrecetada,

se le trata como una moneda al aire,

sin una mano justa

que la atrape en el momento preciso.

La pérdida de él,

se trata como si fuera una enfermedad.

Se automedica con decisiones apresuradas,

hasta que uno se siente fuerte o habilidoso.

Las partes rotas se atan a lo que se encuentre,

y se deja así,

hasta que hacemos como que se nos ha olvidado todo.

El problema surge cuando las vendas usadas tapan los ojos.

Se piensa que el amor duele

cuando nos falta una contraparte,

cuando se llora por dentro en silencio

mientras se sonríe.

Pero eso no es amor, ni una variante de él.

Hay que llamar a las cosas por su nombre,

porque eso para mí, es básicamente tristeza.

Y pensar que todo esto se aprende,

a raíz de un problema de enteros

que jugaron a ser mitades

para complementarse.

Y claro, uno siempre pide más que el otro.

Uno siempre espera más.

Uno cree que merece más

de lo que necesita.

Y se tiene la firme convicción,

de que el amor de nuestra vida

se tiene que sufrir,

porque lo bueno nunca viene fácil,

y se tiene que luchar

a costa de nosotros mismos.

Pero el amor no tiene la culpa,

de que estemos tan mal informados,

acerca de lo que es el amor.

La bitácora del ayer, Aldo Bernal

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